miércoles, 28 de marzo de 2007

sLoW dOwN

Hoy he recibido un correo electrónico que, al principio, al ver que se trataba de un Power Point he estado tentada de eliminar , pero me dije, vamos a ver que te cuentan...

Para quien tenga ganas y paciencia os dejo un fantástico artículo de prensa que escribió un brasileño anónimo y que según he observado a corrido mucho por la red, para quienes no lo haya leido, aqui lo tenéis. Recomiendo paciencia y que lo leais hasta el final.

"Ya van 18 años que estoy aquí en la Volvo, compañía sueca. Trabajar con ellos es una convivencia, cuando menos, interesante...
Cualquier proyecto tarda dos años en materializarse, aún cuando la idea sea brillante y simple. Es regla. En los procesos globales, el afecto a los resultados inmediatos (brasileño, americano, australiano, asiático) causan una ansiedad generalizada. Sin embargo, el sentido de la urgencia no produce ningún efecto en este período, aquí.
Los suecos discuten, discuten, hacen las reuniones de "n" balances...
Trabajan con esquema "slow down" . En el extremo, acaba siempre cuando se da la madurez de la tecnología y de la necesidad: muy poco se pierde aquí...
Hay que considerar que:
1. El país es del tamaño del Estado Sao Paulo (Brasil)
2. El país tiene 9/10 millones de habitantes;
3. Su ciudad más grande, Estocolmo, tiene 500.000 habitantes
4. Compañías de capital sueco: Volvo, Scania, Ericsson, Electrolux, ABB, Nokia, NobelBiocare...
¿Nada mal, no? Para tener una idea, la Volvo fabrica los motores del propulsor para los cohetes de la NASA.
Digo a nuestros grupos globales; el sueco puede estar incorrecto, pero él es el que paga nuestros salarios. Sin embargo, debo precisar que no conozco a gente que tenga una cultura más colectiva sobre eso...
Voy a contarles algo para que se hagan una idea:...
La primera vez que fui para allá, en 1990, uno de los colegas suecos me recogía del hotel todas las mañanas. Era septiembre,hacía frío y una leve nevisca. Llegamos temprano a la Volvo y él estacionó el coche lejos de la puerta de entrada (son 2000 empleados con coche). El primer día no le dije nada, el segundo tampoco, ni el tercero... Más adelante, con un poco más de confianza, le pregunté: "¿Este es tu lugar para estacionar? He notado que como llegamos temprano, el estacionamiento está vacío y dejas el coche en el extremo... "y me contestó así de simple: "es que llegamos temprano, entonces nosotros tenemos tiempo para caminar. Para quiénes llegan después es mejor que estén más cerca de la puerta. ¿No piensas lo mismo?".
Imaginen, ¡Cómo me quedé avergonzado!
Esto me hizo repasar mis conceptos.

Desde 2002, en Europa tiene lugar un gran movimiento llamado "Slow Food". La asociación internacional del alimento lento tiene su base en Italia. El movimiento "Slow Food" pregona que la gente debe comer y beber los alimentos saboreando, disfrutando de su preparación, compartirlos con la familia, los amigos, sin rapidez y con calidad. La idea está en oposición al "Fast Food" americano.

La sorpresa, sin embargo, es que este movimiento del alimento lento es una parte de la base del movimiento llamado "Slow Europe", como precisó Business Week en su última edición europea. La base de todo consiste en la cuestión de "rapidez" y la "locura" generada por la globalización, para mí lo asocio a la "cantidad que tiene" en contraposición a la calidad de la vida o a la "calidad del ser". Según Business Week, los trabajadores franceses, incluso trabajando menos horas (35 horas por semana), son más productivos que sus colegas americanos o ingleses.
Los alemanes, que en muchas compañías habían instituido una semana de 28.8 horas de funcionamiento, han modificado su productividad para no crecer, nada menos del 20%. Esta llamada "actitud lenta" está llamando la atención incluso de los americanos, apologistas del "Fast" y del "Do it now". Sin embargo, esta "actitud sin prisa" no significa hacer poco, ni poca productividad. Significa hacer bien las cosas y trabajar con más "calidad" y "productividad" con una perfección más grande, con atención a los detalles y con menos "tensión".
Significa volver a tomar los valores de la familia, de los amigos, del tiempo libre, del ocio y de las comunidades pequeñas. Del "local", presente y concreto, en contraposición al "global", indefinido y anónimo.
Significa volver a tomar los valores humanos esenciales, los placeres pequeños de lo cotidiano, de la simplicidad de vivir y convivir. Significa un ambiente de trabajo menos coercitivo, más alegre, "leve" y, por lo tanto, más productivo, donde los seres humanos felices hacen, con placer, lo que saben hacer mejor.
Esta semana, quisiera que usted pensara un poco en esto. ¿Será que los viejos dichos "Caminando despacio se puede llegar lejos" o "la rapidez sigue siendo el enemigo de la perfección" no merecen otra vez nuestra atención en estas épocas de locura salvaje? ¿Será que nuestras compañías tendrían que pensar también en programas serios de "calidad sin prisa" incluso para aumentar la productividad y calidad de nuestros productos y servicios sin la pérdida necesaria de la "calidad del ser"?

La película Perfume de Mujer tiene una escena exquisita, en la cual un personaje ciego (interpretado por Al Pacino) saca a bailar a una mujer joven y ella contesta: "no puedo, porque mi novio va a llegar en unos minutos." El responde "pero en un momento se vive una vida", conduciéndola en un paso de tango. Esta escena es el momento más bonito de la película.

Alguna gente vive en función del tiempo, pero parece que solamente lo alcanza cuando muere infartado, o algo así. Para otros, el tiempo tarda en pasar; están ansiosos con el futuro y se olvidan de vivir el presente, que es lo único que existe. El tiempo lo tienen todos por igual. Nadie tiene ni menos que 24 horas por día. La diferencia es lo que cada uno hace con su tiempo. Necesitamos saber aprovechar cada momento, porque, como John Lennon dijo... "la vida es lo que sucede mientras hacemos planes para el futuro".

Felicitaciones por leer hasta el final... Muchos no leerán este mensaje hasta el fin porque no pueden "perder" su tiempo en este mundo globalizado

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante el artículo, no lo había leido hasta hoy. Parece ser que con las prisas...
No cabe duda de que para hacer las cosas bien las tienes que tranquilo y disfrutando.
Y un dato te voy a dar, nuestra querida Mungia,(ejem) forma parte de las llamadas "slow city" caracterizado por un modelo de vida pausado, el respeto a las tradiciones, al medio ambiente y al turismo sostenible.
Forman parte tambien algunos municipios catalanes, no sabria decir cuales.
Mas informacion:
http://www.cittaslow.net/default.asp

P.D: La camiseta tuya la tengo guardada.

Anónimo dijo...

Wow! Realmente bueno el artículo ^^
La verdad eske hasta me siento un poco mal al leerlo, pues yo creo ke formo parte del movimiento FAST! FAST!
Si que deberiamos tomarnos las cosas con más calma, pero a mi me da miedo. Si te quedas quieta la gente te come... No puedes ir despacio si EL RESTO DEL MUNDO va cagando leches...

En fin, ya iré despacito cuando me jubile, joas joas joas XDDD

Unknown dijo...

WoW!!

Flipante lo de Munguia Lan, aunque si lo pienso detenidamente ahora ato cabos, pq mira que soys tranquilotes por allí, y lo de comer y beber tranquilamente y disfrutando, qué decir... jejeje

En cuanto a ti Blackcat, que jodia! "Ya iré despacito cuando me jubile" dice! con lo que aún te quedaaaaaaaaaa...

La verdad chicos yo estoy entre pinto y valdemoro, para según qué me gusta ir lenta (como el comercio, el bebercio y el estar y disfrutar con los mios) pero en la vida soy como una turbina... :P

Anónimo dijo...

"Nu" ha comprendido que "Su" rapidez podría haber tirado a la basura el ppt sobre el elogio a la lentitud. Elogio que en Oriente, era la búsqueda de la perfección a través de la reflexión. Algo que resulta imposible en lo que Freud llamó la civilización de la prisa y que Charlot inmortalizó en sus Tiempos Modernos. Gorka - SF Spain